La Verdad sólo puede experimentarse no racionalizarle, esto significa que solo puede vivirse en un tiempo presente. Si queremos sintonizarnos con esa Verdad o con una conciencia más sutil, requerimos concentrarnos en vivir la experiencia del momento presente en que nos encontremos con la mayor intensidad y entrega posible, bien sea al tocar o al hacer cualquier cosa en la vida. Como tal la palabra presente significa un regalo y a su vez se convierte en una oportunidad.

Para improvisar centro mi atención en el momento presente atendiendo detenidamente lo que escucho y surge en mi mente.

Al desarrollar más presencia mental en nuestras vidas, podemos estar más conscientes de nuestros estados emocionales, para darnos cuenta de lo que sucede en nosotros y evitar reaccionar sin necesidad de tomarnos unos momentos para pensar de qué manera podemos responder mejor a determinada situación. Al improvisar, si mantenemos nuestra atención en lo que escuchamos se nos abren automáticamente las posibilidades de crear nuevas expresiones musicales.

En la improvisación la presencia mental me ayuda a darme cuenta hacia dónde puedo dirigir mis manos en los siguientes movimientos.

En los cursos de improvisación en piano de esta página encuentras maneras de desarrollar, además de tus habilidades técnicas, tus capacidades humanas para tener la mentalidad adecuada al momento de improvisar.