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El Mal del Siglo y Naturaleza del Bienestar

Ser neurótico es ser capaz de portarse mal sin sentirse responsable de los propios actos. Jung dice que la persona enferma no tiene que aprender a deshacerse de su neurosis sino aprender a soportarla. Porque la enfermedad no es una carga superficial y sin sentido, es lo que la persona es; la misma persona es ese “otro” que siempre tratamos de excluir. Si huimos del mal que hay en nosotros, nos ponemos en peligro. Todo mal es vitalidad potencial que necesita ser transformada. Pretender vivir sin el potencial creativo de nuestra propia destructividad es como ser un ángel de cartón. Sheldon B. Kopp

– La persona neurótica interpreta la realidad de manera narcisista: no acepta la realidad como es sino como ella quiere que sea; vive en sus deseos y su visión de la realidad es lo que ella quiere que sea. Si su deseo no se cumple se pone furiosa para obligar al mundo a cumplir sus deseos, o reacciona sintiéndose impotente por no poder realizar lo imposible. En el desarrollo normal del niño, esta actitud cambia lentamente a una actitud madura de ser consciente de la realidad y aceptarla con sus leyes. La noción de libertad de una persona neurótica es la omnipotencia del narcisismo, mientras que la noción de libertad de una persona plenamente desarrollada es la de reconocer la realidad y sus leyes y actuar según lo necesario, relacionándose con el mundo de manera productiva, asimilando al mundo con los poderes propios del pensamiento y el afecto.

– Freud: El conocimiento conduce a la transformación: en el acto mismo de conocerse a sí mismo se transforma a sí mismo. Spinoza: El conocimiento intelectual transforma sólo si es también emotivo.

– Nuestro pensamiento consciente es sólo una parte pequeña del proceso psíquico total que se desarrolla en nuestro interior.

Vivir exclusivamente en la parte consciente de la psiquis ha producido una condición general denominada “El Mal del Siglo”.

Síntomas del mal del siglo:


  • La vida opacada
  • Automatización del humano
  • Alejamiento de sí mismo
  • Alejamiento de otros
  • Alejamiento de la naturaleza
  • Vivir sin propósito
  • Vivir sin significado
  • El deseo de escapar a la inseguridad
  • El deseo de huir de la soledad
  • Aburrimiento
  • Se siente que la vida se está escapando como arena entre los dedos
  • Se siente que uno se va a morir sin haber vivido en realidad
  • Ausencia de alegría de vivir incluso en medio de un mar de facilidades y comodidades
  • Descontento
  • Ansiedad
  • Depresión


La cura del mal del siglo no consiste en la ausencia de la enfermedad sino en la presencia del bienestar.

Para cada uno de nosotros la única esperanza radica en sus propios esfuerzos, en completar su propia historia, no en las interpretaciones de otros. Si una ha de librarse de sí mismo tendrá que aceptarse primero. No se puede salir de una trampa a menos que primero haya caído en ella. Superar por medio de la entrega es la única salida. Cuando alguien se siente estancado y confuso y con sus buenas intenciones trata de soltarse y tener claridad, permanece crónicamente atrapado en el pantano de su propia terquedad. Si se permite profundizar en la experiencia de estar estancado, sólo entonces podrá recuperar esta parte de sí mismo que lo está deteniendo. Solamente dejar de tratar de controlar tu pensamiento y dejarte hundir en tu confusión te traerá la claridad que buscas.

(Alan Watts habla de la ley del reverso: cuando uno trata de flotar en el agua se hunde y cuando trata de hundirse flota.) Uno se descubre a sí mismo cuando siente curiosidad por los otros seres humanos que viven con uno y luchan también en este mundo. Las únicas veces que obtenemos lo que ansiamos es cuando dejamos de aferrarnos a la búsqueda. En esos instantes de entrega, todo es posible: “El universo entero cede ante una mente en calma”.

Nadie puede recuperar su propia belleza e inocencia sin antes mirar cara a cara la fealdad y el mal que existen dentro de sí. Si vivimos como peregrinos en cada instante nos saldremos de la historia y entraremos en la vida natural como un viajero honesto, solitario, de morral a la espalda, “el verdadero ser humano, quien vive la plenitud de la vida, siempre está sobre la marcha” La jornada misma es su salvación. La apertura a salvarte de una existencia meramente psicológica se debe reafirmar una y otra vez. La iluminación no produce perfección, simplemente ofrece la posibilidad de vivir con la aceptación de la imperfección. Uno dobla su sufrimiento sintiéndose infeliz por la propia infelicidad.” Sheldon B. Kopp

La Naturaleza del Bienestar: evolución psíquica del ser humano

Erich Fromm define el bienestar como una existencia acorde con la naturaleza del humano.

– A diferencia de los animales, que tienen un mecanismo de adaptación al medio ambiente incorporado en sus instintos y así viven completamente supeditados a la naturaleza, los humanos, aunque también están dentro de la naturaleza, la trascienden en su pensamiento y en su conciencia de sí mismos como entidades supuestamente separadas, lo cual los hace sentir solos, perdidos e impotentes, a veces a un grado insoportable.

– Bienestar es la condición de alcanzar el pleno desarrollo de la razón, no en el sentido de un juicio puramente intelectual, sino en el sentido de asimilar la verdad como es. Se trata de superar el propio narcisismo omnipotente y ser abiertos, responsables, sensibles, conscientes, vacíos de condicionamientos. Es ser consciente de uno mismo más allá del ego, dejando atrás la codicia, dejando de procurar agrandar y preservar el ego.

– Bienestar quiere decir superar la separación y el alejamiento y la indiferencia frente al propio destino y el destino común de la humanidad. Es haber nacido totalmente, ser lo que uno es potencialmente, tener la capacidad plena para la alegría y la tristeza, despertar del sonambulismo en el que la persona común vive, ser creativo, plenamente consciente.

– Bienestar es el resultado de la integración del Consciente y el inconsciente: Condiciones subjetivas internas y estados de funcionamiento aquí y ahora. Proceso gradual de entendimiento del carácter ficticio, parcial, relativo o irreal de nuestra conciencia “normal”. Ignoramos el hecho de que ya poseemos todas las facultades necesarias para ser alegres y afectuosos unos con otros.

– Bienestar es experimentar la divinidad en vez de contentarse solamente con pensar emocionados en ella.

– Bienestar es Libertad: condición en la cual todos los impulsos creativos y benevolentes inherentes en el corazón humano operan sin obstáculos. Experiencia integradora en la cual conocedor y conocido se unifican. Requiere una mente libre y sin obstrucciones, aún la idea de unidad y totalidad es un impedimento que amenaza la libertad original del espíritu.

En su libro Cosmic Consciousness, a Study and the evolution of the Human Mind, Richard Bucke dice que el humano ha progresado desde su “conciencia simple” o animal, a la conciencia humana de sí mismo y actualmente está en el umbral de desarrollar la Conciencia Cósmica, un evento evolutivo revolucionario que ya ha ocurrido en un número de personalidades extraordinarias en los últimos dos mil años y antes.


[Extraído del Módulo Desenchúfate del Programa ADH: Maestro en Desarrollo Humano Integral]


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